Acuerdo/ Guías de Liderazgo
El ministerio con los demás es un don destinado a enriquecer a los demás e indirectamente a nosotros mismos. Liderar un ministerio en nuestra iglesia del Santo Nombre de María ocurre en dos niveles. El primero de ellos es ayudar a avanzar la misión de nuestra iglesia nutriendo a los compañeros de un ministerio para crecer en su relación con Cristo y los demás. En segundo lugar, es capacitar a los miembros, en particular a un compañero co-líder tanto en la exploración como en el desarrollo de su propia llamada hacia el liderazgo ministerial.
Para nutrir a los miembros:
Para capacitar a los colíderes:
Para nutrir a los miembros:
- Liderando con el ejemplo, dentro y fuera de la iglesia, particularmente aprovechando las oportunidades de formación continua de la fe de los adultos en la parroquia y la arquidiócesis;
- Recordando que el ministerio es sobre las personas, no sólo proyectos;
- Proporcionando una visión clara y esperanza en el logro de la misión, metas, proyectos y eventos del ministerio;
- Escuchar y estar abierto a nuevas voces para la vida continua del ministerio;
- Trabajando con el representante del Consejo Parroquial para crecer en su comprensión de la amplitud de nuestra vida parroquial; y
- Proporcionar oportunidades para que sus miembros reciban una formación espiritual y ministerial continua.
Para capacitar a los colíderes:
- Recuerda que estamos llamados a la comunidad y necesitamos modelarla para los miembros del ministerio.
- Tener claro el papel de cada uno en el liderazgo del ministerio;
- Siendo sensibles a los dones y habilidades de cada uno;
- Considerando las metas y la misión del ministerio, los líderes son animados a formular mutuamente un conjunto de objetivos, plazos y expectativas;
- Participar en las oportunidades de formación continua en la fe que se ofrecen dentro de la parroquia y la arquidiócesis.